Proceso de diseño

Edificio de viviendas sostenible

Hoy, el artículo gira en torno a la viabilidad y ventajas de un edificio de viviendas sostenible, ayudándonos de un ejemplo en Barcelona, La Borda.
Publicado el 31 mayo 2018

Hoy en nuestro blog vamos a introducir un tema que esta a la orden del día ya que representa una apuesta de futuro para las ciudades y núcleos urbanos.

Plantear un edificio de viviendas eficiente puede parecer algo inviable pero lo cierto es que es algo por lo que cada vez se apuesta mas y existen ejemplos de este tipo de edificaciones en ciudades del mundo entero.

En este articulo nos centraremos en la madera como sistema de construcción eficiente para conseguir un edificio de viviendas sostenible. Os explicaremos como podemos aprovechar sus cualidades y ventajas para amortizar la apuesta por este material de construcción y acabaremos con un caso practico que se esta construyendo actualmente en Barcelona.

Se trata de un edificio de viviendas sostenible proyectado por un equipo de arquitectos y un colectivo de vecinos mediante un interesante modelo participativo.

¡Vamos allá!

 

 

La madera como sistema constructivo para un edificio de viviendas sostenible

 

A pesar de que en España no es muy habitual el construir en madera, últimamente las políticas de construcción eficiente han favorecido el uso de éste material ya que la madera es uno de los materiales de construcción más sostenibles que existen en el mercado tanto por sus propiedades como por su capacidad de ser totalmente renovable.

Si bien es cierto que por lo general el uso de la madera como material constructivo se da más en viviendas unifamiliares, existe actualmente un aumento de su uso en casos de edificios de viviendas plurifamiliares.

Entendemos por edificio de viviendas sostenible de madera, ese edificio cuya estructura y cerramientos (paredes y techos) están construidos totalmente en madera y que además funciona de forma eficiente energéticamente.

La versatilidad y flexibilidad que ofrece la madera como material de construcción, nos permite adaptarnos a diferentes situaciones gracias a la gran diversidad de detalles constructivos que el material nos permite diseñar.

 

Para construir un edificio de viviendas sostenible, apostaremos por un sistema estructural de pilares y vigas de madera.

Como refuerzo a esta estructura principal, podemos rellenar con unos marcos que nos sirvan a la vez de subestructura y de sujeción para los muros que vendrán a cerrar y separar las viviendas o estancias.

Estos muros pueden ser o bien paneles prefabricados de madera (el aislamiento ya viene incluido en el panel), o bien se puede generar un entramado in situ que se irá rellenando con aislante de fibras naturales u otro aislamiento de origen natural y cerrando con tablones o planchas de madera.

Al trabajar con un material flexible como la madera, disponemos de una gran variedad de sistemas constructivos, cerramientos y acabados con los que proyectar.

Sin embargo, a nivel térmico, hay que saber contrarrestar la baja inercia térmica del material para conseguir un edificio de viviendas sostenible que no pierda calor y consuma poca energía.

Para ello es vital que el edificio quede bien aislado. Si aseguramos la estanqueidad y aislamiento del edificio podremos asegurar un buen sistema de calefacción y refrigeración durante todo el año.

 

La Borda, un ejemplo de edificio de viviendas sostenible de madera en Barcelona

 

El proyecto de la Borda es una propuesta innovadora de edificio de viviendas sostenible en Barcelona.

Se trata de un proyecto de vivienda cooperativa, que empezó a plantearse entre 2012 y 2014 (año en el que se aprueba el proyecto de arquitectura) y que se ha ejecutado entre 2017 y 2018.

Y os preguntaréis ¿Qué es la vivienda cooperativa?

La vivienda cooperativa parte de una nueva forma de hacer vivienda, la covivienda, que se está promoviendo mucho sobre todo desde diferentes asociaciones y colectivos ya que es un formato que permite vivir a una comunidad de personas en un inmueble sin ser propietarios o arrendatarios del mismo.

El colectivo de La Borda. ¿Quién son?

 

Es el caso de La Borda, un colectivo formado por más de cincuenta vecinos del barrio de La Bordeta, en el distrito de Sants – Montjuic (Barcelona).

Este colectivo se creó en 2012 con la voluntad de construir un edificio residencial en cesión de uso. Es decir, construir un edificio que respondiese a “la necesidad de acceder a una vivienda digna, social, asequible y ambientalmente sostenible con la voluntad de fomentar nuevas formas de convivencia y de generar comunidad a través de la interrelación entre vecinos y vecinas”.

Para la construcción del edificio, el colectivo de La Borda cuenta además con el apoyo y participación de otras cooperativas que les han ayudado a gestionan de forma activa y democrática todas las fases del proyecto empresarial. Entre estas, es importante mencionar el colectivo de LaCol, responsable del desarrollo del proyecto arquitectónico de las viviendas.

 

¿Qué hacen?

 

Todo el proyecto gira entorno a un innovador modelo de cesión de uso, un sistema que se basa en una propiedad colectiva donde las viviendas no se compran ni se alquilan.

Se trata de un modelo importado de países como Dinamarca (modelo Andel) y Uruguay (modelo FUCVAM) y prevé una doble cesión: del suelo y del piso.

El modelo de cesión de uso permite hacer frente a posibles especulaciones. Representa además un cambio radical a la idea tradicional de vivienda, consiguiendo ser una alternativa viable en el ámbito de la vivienda pública y una nueva forma de acceso y gestión para las personas con rentas bajas.

 

Cómo lo hacen

 

En el caso que os explicamos hoy, La Borda, es el Ayuntamiento de Barcelona el que cede a la cooperativa el suelo público, destinado a la construcción de Vivienda de Protección Oficial (VPO), con un derecho de superficie de 75 años, a cambio del pago de un precio “x” anual.

Por su parte, los socios-habitantes tienen que cumplir los criterios de VPO, y asumen el coste de la construcción del edificio o de su rehabilitación a través de una aportación inicial de 15000 euros y de un crédito, que amortizarán pagando una cuota mensual asequible a sus posibilidades.

Los socios son libres de dejar la cooperativa en cualquier momento, recuperando además su inversión inicial.

 

El resultado

 

A nivel de proyecto de arquitectura, el resultado de todo el proceso recoge las propuestas planteadas por los habitantes sobre el programa del edificio, las estrategias ambientales, las tipologías de viviendas y los espacios de servicio necesitados. Finalmente, el proyecto ejecutivo refleja la construcción de una comunidad formada por diferentes y múltiples estructuras familiares.

 

El edificio responde así a tres principios:

 

1. Re-definir el programa de la vivienda colectiva

En cuanto al programa, este edificio de viviendas sostenible, prevé 28 viviendas de diferentes tipologías y espacios comunes, que se articulan alrededor de un patio central.

Los espacios comunes que están en la planta baja son: una cocina-comedor, un espacio de trabajo compartido, una lavandería, una sala polivalente, un espacio para invitados, una sala de salud y cuidados y un aparcamiento para bicicletas.

Ésta disposición recuerda la organización de las masías tradicionales catalanes, donde las estancias para el ganado, espacios de Trabajo y cocina se ubicaban en las plantes bajas para aprovechar el calor producido para calentar las estancias y dormitorios de los niveles superiores.

Se plantean, además, espacios exteriores y semi-exteriores de uso comunitario tales como el patio, la azotea con cubierta verde, una terraza con huertos urbanos etc.

El diseño de las viviendas parte de una tipología base de 40 m2, que se puede ampliar con uno o dos módulos más en caso de necesitar una vivienda de mayor tamaño.

Para responder a esta flexibilidad, el proyecto apuesta por utilizar la madera como elemento de construcción tanto de la estructura como elementos de división (forjados y muros). La madera es un material ecológico, versátil y resistente que ofrece la flexibilidad y resistencia necesarias para construir un edificio de viviendas sostenible.

 

2. Sostenibilidad y calidad ambiental

Otro de los objetivos principales del proyecto de La Borda, era el conseguir construir un edificio de viviendas sostenible, es decir, con el menor impacto ambiental posible, tanto durante la obra como durante su vida útil.

Pero, conseguir esto no podía comprometer el confort de los usuarios del edificio, sino todo lo contrario. El confort de los habitantes del edificio debía estar garantizado con el mínimo consumo posible, con tal de reducir los costes globales de acceso a la vivienda.

La apuesta del edificio parte de reducir al mínimo la demanda inicial de energía del edificio (electricidad, agua, materiales, gestión de residuos etc.), y priorizar las estrategias pasivas o consumo de energías renovables aprovechando al máximo los recursos existentes en el lugar.

 

3. Participación de los usuarios

Durante el proceso de diseño, construcción y uso del edificio de La Borda, se ha tenido en cuenta la participación de sus futuros usuarios, puesto que representan la variable mas condicionante del proyecto.

El vínculo y comunicación entre el colectivo y el equipo de arquitectura encargado del proyecto ha sido constante y vital para conseguir un resultado a medida de todos los habitantes de este ejemplo de edificio de viviendas sostenible en Barcelona.

 

Con el artículo de hoy queremos explicar una nueva realidad en la que es 100% viable la construcción de un edificio de viviendas sostenible, utilizando la madera como sistema estructural y material de construcción eficiente.

Para ejemplificar y poner un caso real, hemos elegido este edificio de viviendas sostenible en Barcelona. La Borda tiene además un enfoque social y muy cooperativo que nos encanta ya que como en Slow Studio, se busca la máxima confianza entre el cliente y el equipo de arquitectos consiguiendo un resultado final funcional y al gusto del propietario o constructor.

Slow Studio apuesta por ciudades eficientes cuyos edificios son ecológicos, sanos y autosuficientes y esta realidad solo será posible con la participación de todos los agentes, el promotor, el arquitecto y el cliente final en la activa apuesta por alternativas reales de construcción ecológica y sana de consumo nulo y respetuosa con el medio ambiente.

No dudéis en contactar con nosotros para cualquier duda que os pueda surgir, en Slow Studio gestionamos agrupaciones de propietarios que quieren llevar a cabo la construcción vía cooperativa o comunidad de bienes de varias viviendas ya sea en forma de edificio de viviendas o en forma de casas independientes agrupadas,