Energía

Diseñar una instalación eléctrica libre de campos eléctricos

Nuestro despacho defiende la salud de los clientes en sus futuras viviendas. Hoy veremos cómo diseñar una instalación eléctrica libre de campos eléctricos.
Publicado el 17 diciembre 2017

Seguro que todos recordamos de nuestros años de instituto la famosa Ley de Coulomb, ¿no? Tranquilos nosotros también hemos tenido que repasar el enlace en la wiki para escribir este artículo, dedicado al diseño de una instalación eléctrica libre de campos.

Si bien hoy no vamos a hablar de lecciones básicas de teoría eléctrica, sí que es preciso tener presente que los conceptos sobre los que partimos al analizar las implicaciones y efectos de los campos generados por una instalación eléctrica en un hogar parten de fundamentos físicos estudiados y definidos durante siglos.

Así, hoy en día sabemos que si por un cable pasa electricidad, este cable genera un campo eléctrico y otro magnético y que ambos a gran magnitud son mortales.

 

¿Pero qué pasa con las pequeñas magnitudes?

La conexión de la lamparita de noche, el secador de pelo o el cargador del móvil en el cabezal de la cama son algunos de los ejemplos cotidianos de campos que nos pueden parecer inocuos porque no vemos ni notamos pero que la física y las mediciones demuestran que no lo son.

Nuestro cuerpo tiene cargas eléctricas, nuestras neuronas reciben y emiten información mediante pequeñas descargas y somos capaces de cargarnos y descargarnos con electroestática, por este motivo, los campos emitidos por los aparatos eléctricos de uso diario así como la propia instalación eléctrica de nuestro hogar no son inocuos a nuestro organismo.

Y aquí es cuando llegan los escépticos y nos cuentan que no podemos aislarnos de la tecnología y que no vamos a vivir en una caverna para estar protegidos de los campos eléctricos.

¡Pues nosotros os proponemos que sí! Que es posible aislar estos campos o mejor dicho, tomar medidas para reconducirlos a tierra de forma que nuestro hogar se convierta en nuestra pequeña caverna de salud y que al menos cuando lleguemos a casa sepamos que podemos descansar tranquilos libres de campos eléctricos que alteren nuestro bienestar.

 

¿Cómo nos afectan los campos eléctricos?

 

Sabemos que nuestro cuerpo produce pequeñas corrientes eléctricas de forma natural debido a las reacciones químicas del organismo.

Los nervios, por ejemplo, envían señales a través de los impulsos eléctricos. De hecho, en los electrocardiogramas podemos detectar pequeños impulsos que emite el corazón.

Así, el cuerpo humano también está cargado eléctricamente y es por esta razón que somos capaces de recibir los campos eléctricos externos que alteran nuestro equilibrio natural.

A los campos eléctricos se les atribuye síntomas como dolores de cabeza, ansiedad o incluso depresiones, náuseas y fatigas.

 

¿Cuáles son las fuentes de campos eléctricos?

 

Bien, hasta aquí sabemos que los campos nos afectan, pero de dónde provienen exactamente.

Empecemos por el principio.

¿Qué es un campo eléctrico?

Un campo eléctrico es un campo físico, invisible para el ojo humano, que consiste en la interacción de distintas cargas eléctricas. Un campo se crea por atracción y repulsión de distintas cargas eléctricas y decrece cuando aumenta la distancia de la fuente que lo emite.

En nuestra vivienda los campos eléctricos se producen en relación a los cables empotrados o vistos. Siempre que haya tensión en un cable existirá un campo eléctrico. Es decir, siempre que un cable esté conectado a la red eléctrica, habrá campos.

Si tenemos una lámpara enchufada a la corriente, aunque esté apagada, ésta tendrá la tensión que le corresponde al voltaje que le llega.

Si pensamos en toda la red eléctrica de nuestra vivienda, nos damos cuenta que estamos rodeados de una gran cantidad de campos eléctricos, pues todos los cables están conectados y en funcionamiento aunque los interruptores estén parados.

Además de los cables –vistos o empotrados- también producen campos las cajas de fusibles, los transformadores y los electrodomésticos sin toma de tierra, ya que no pueden desviar la tensión.

Otras fuentes peligrosas de campos son los calefactores eléctricos, almohadillas y esterillas eléctricas o las camas regulables con mandos eléctricos. Todos ellos funcionan con un sistema de cableado y no disponen de toma de tierra por lo que generan campos a partir de la tensión que les llega y lo peor es que se trata de aparatos que se utilizan en contacto total con el usuario.

 

Diseño de una instalación eléctrica libre de campos eléctricos

 

A partir de aquí entremos de pleno el tema, ¿cómo se lleva a cabo el diseño de una instalación eléctrica libre de campos?

Si estamos planteando una obra nueva, probablemente nuestro arquitecto no tenga mucha idea de esto de las instalaciones eléctricas biocompatibles a no ser que trabajéis con un arquitecto experto en Bioconstrucción o Biohabitabilidad.

Si no es así, deberíais contactar con un experto bien a través del Instituto Español de Bioconstrucción o bien a través de la empresa Bihho, que son colaboradores habituales de nuestro estudio.

Por supuesto, también podéis contactarnos y os podemos echar una mano a encontrar un experto en vuestra zona ya sea a través de nuestra red de colaboradores Slow Studio o bien a través de nuestro propio estudio donde nos encargamos de llevar a cabo el diseño de una instalación eléctrica libre de campos en cada nuevo proyecto.

En caso de proyectos de reforma, también es posible llevar a cabo el diseño de una instalación eléctrica libre de campos, pero las acciones a llevar a cabo pueden ser distintas en el sentido de que si debemos aprovechar parte de la instalación existente deberemos adaptarla o incluso instalar sistemas de apagado nocturno.

Además, en caso de reformas, sería recomendable encargar un estudio de mediciones previos para valorar donde es más urgente actuar.

Veamos paso por paso los aspectos a tener en cuenta en cualquier diseño de una instalación eléctrica libre de campos.

 

 

Cableado

 

Cuando escogemos el tipo de cables que utilizaremos en el diseño de una instalación eléctrica libre de campos, una de las primeras comprobaciones que deberemos realizar es que no lleve PVC.

El proceso de fabricación del PVC es especialmente dañino para el medioambiente y su uso libera gases tóxicos especialmente cuando hay cambios de temperatura. En caso de incendio los gases que emiten son extremadamente nocivos.

También debemos utilizar cables libres de halógenos, que se identifican en el mercado con las siglas LH y Z1. Los halógenos son elementos tan reactivos que no se encuentran libres en la naturaleza. De hecho, el cableado libre de halógenos ya es obligatorio en locales comerciales, no pasa lo mismo en viviendas donde se respeta el criterio de cada usuario para la elección del material de cableamos.

Una de las mejores opciones para el diseño de una instalación eléctrica libre de campos son los cables flexometálicos apantallados y las mangueras de cables apantallados. Estos, son más caros que los cables convencionales así que podemos utilizarlos en zonas más sensibles como habitaciones o zonas donde pasamos muchas horas como zonas de trabajo o descanso.

Un cable apantallado, o blindado, lleva una malla o un tubo metálico como recubrimiento. Se usa para evitar el acople de ruidos u otras interferencias. Una de sus ventajas es que reduce en gran medida los campos eléctricos.

 

Muros conductores

 

Existen dos métodos para apantallar un muro o pared.

El primero es colocar una malla metálica en la composición del muro y el segundo es pintarlo con una pintura conductora. En ambos casos se debe conectar a un conductor que va a parar a una toma de tierra.

Esto impide que se transmitan los campos eléctricos de los cables empotrados en el muro, reconduciéndolas a una toma de tierra y liberando el espacio de las mismas.

 

Cableado de tierra

 

El cableado de toda instalación eléctrica se compone de 3 cables, dos para el funcionamiento del aparato al que se conecte y uno para la toma de tierra.

Los dos cables principales son el fase y el neutro y se encargan de que la corriente eléctrica pueda llegar y volver. Suelen ser de color azul y marrón.

A estos dos se les añade el cable de tierra, que suele ser verde y amarillo, y se encarga de desviar la carga eléctrica a una toma de tierra.

La toma de tierra de una vivienda es un cable que finaliza con una pica metálica que se introduce en el subsuelo bajo los cimientos de la casa y actúa como lo hace los rayos en contacto con la tierra. La tierra es una gran masa que es capaz de absorber electricidad.

Así, la misión de la toma de tierra es derivar toda esa carga que pueda entrar en contacto con las personas. Si en el diseño de una instalación eléctrica libre de campos planificamos de forma adecuada el cableado de toma de tierra, conseguiremos reducir los campos que puedan disiparse en el hogar.

Otra opción es trenzar los cables de fase y neutro entre ellos. El cableado trenzado también es más caro y por ello, esto se suele hacer en zonas de descanso en las que es esencial dormir libres de campos eléctricos.

 

 

Cajetines

 

El cajetín es la caja o envoltorio donde se colocaran posteriormente los enchufes e interruptores y es muy importante considerarlos en el diseño de una instalación eléctrica libre de campos.

La mayoría de los cajetines que encontramos en el mercado, llevan PVC –policloruro de vinilo-, por lo que son dañinos para el medioambiente. Lo ideal son los nombrados cajetines Kaiser, que son de grafito y con conexión a toma de tierra. De nuevo, se trata de elementos bastante caros y se suelen colocar solo en las habitaciones o zonas de uso prolongado.

 

Cajas de empalmes y conexiones

 

En el caso de las cajas de empalmes y conexiones pasa lo mismo que con los cajetines. Evitaremos las que contengan PVC y en las habitaciones intentaremos colocar cajas Kaiser.

Sin embargo también tenemos la opción de utilizar cajas metálicas. Su ventaja es que la caja actúa como apantallamiento de forma que los campos se derivan a una toma de tierra.

Tanto si utilizamos cajas Kaiser como si utilizamos caja metálicas, será necesario disponer de conexión con la toma de tierra de la instalación.

 

Desconector eléctrico automático (bioswitch)

 

Un bioswitch es un desconector automático que convierte la corriente alterna en corriente continua. En la habitación, por la noche, cuando apagamos todas las luces o enchufes, el dispositivo reconoce que no hay suministro y desconecta la tensión de 230V. Mantiene una pequeña cantidad de 6 o 9V para mantener el sistema y volver en funcionamiento cuando encendamos otra vez los aparatos.

El bioswitch es en resumen, un elemento que desconecta de forma automática el suministro de electricidad cuando no hay consumo.

Si realizamos en diseño de una instalación eléctrica libre de campos desde un principio porque se trata de una reforma integral o de una obra nueva, en principio no sería necesario trabajar con desconectores de red. Puesto que podemos planificar cada elemento de forma que no genere campos.

Sin embargo, si se trata de una actuación a posteriori o bien no tenemos suficiente presupuesto, podemos optar por utilizar desconectores automáticos.

Su punto débil es que no detecta los tubos fluorescentes o las bombillas de bajo consumo debido a la poca tensión que necesitan para funcionar.

 

Disposición del cableado

 

Hasta aquí hemos definido cada uno de los elementos que colocamos en el diseño de una instalación eléctrica libre de campos. Pero es necesario no olvidar la distribución general de la misma, es decir la disposición del cableado a lo largo de toda la casa.

Existen dos sistemas básicos: en estrella, en que se parte de un mismo punto, y en anillo, donde la instalación se instala de forma continua.

 

Sistema en anillo

En una red organizada en anillo suele haber más de un punto de alimentación.

Es un sistema fácil de instalar y reconfigurar. No obstante, esta organización produce campos perturbadores eléctricos y magnéticos adicionales.

 

Sistema en estrella

El sistema en estrella es el mejor para una instalación eléctrica libre de campos eléctricos. Se trata de una red que parte toda de un mismo punto de alimentación. Por eso es fácil de reparar una parte del circuito cuando se daña.

Su punto débil es que todo depende de una misma alimentación central.

En la instalación eléctrica libre de campos debería disponerse un sistema en estrella, con un circuito eléctrico de luz y tomas de corriente independiente en cada habitación. De esta forma permitiríamos una desconexión selectiva que nos permitiría reducir los campos eléctricos en las estancias que quisiéramos.

Recordaros como siempre, que si estáis valorando el diseño de una instalación eléctrica libre de campos, ya sea para la construcción de una vivienda nueva como para una reforma integral, podéis contactar con nosotros y os podemos pasar el contacto de expertos en el tema. No olvidéis que la salud en vuestro hogar es lo más importante.