Proceso de diseño
Recomendaciones para construir una casa ecológica

Cuando un nuevo cliente nos llama para construir una casa ecológica, le proponemos reunirnos para explicarle de qué va esto de construir una casa ecológica y sana.
En realidad, reunirnos antes de empezar, a nosotros nos sirve para conocer al cliente y para que ellos nos conozcan. Generalmente, la persona que quiere construir una casa ecológica, es una persona consciente y con un alto nivel cultural que busca un profesional solvente que pueda asesorarle en todo el proceso desde la experiencia y la confianza mutua.
De hecho en el estudio, creemos que el trato personal y la comunicación constante son el factor clave del éxito de la construcción de una casa ecológica, puesto que se trata de un proyecto largo que requiere gran implicación por parte del cliente en la toma de decisiones sobre cómo va a vivir y que compromete una inversión económica de toda una vida por lo que nuestra responsabilidad como técnicos es crucial.
Si bien cada proyecto de casa ecológica es diferente y responde a unas necesidades muy concretas de cada terreno y de cada familia, sí que hay una serie de recomendaciones para construir una casa ecológica que son comunes en todos los casos y que hemos decidido recoger en este post para aquéllos que tengáis planeado poneros en marcha.
Es importante contactar con un arquitecto antes de empezar
Empezar buscando un arquitecto es algo que muchas veces ya se hace de forma natural. Pero cabe destacar la importancia de este paso, pues la vivienda resultante puede variar mucho en función del despacho que se contrate.
El arquitecto debe tener conocimientos y experiencia en construcción de casas ecológicas.
Optar por un diseño a medida
El contratar a un arquitecto, casi siempre implica un diseño a medida de la vivienda. Sin embargo, hay personas que empiezan buscando diseños base obtenidos de catálogos de constructores de casas prefabricadas.
El diseño de medida de un arquitecto va a tener en cuenta nuestros requerimientos y los del lugar donde se ubica la casa, algo esencial cuando estamos construyendo una casa ecológica.
Sí que es verdad que hay personas que prefieren disponer de un precio cerrado antes de empezar el proyecto, y en este caso, en Slow Studio, por ejemplo, ofrecemos la posibilidad de partir de nuestra vivienda base ecológica para adaptarla al terreno, algo que nos permite ofrecer un precio cerrado con la ventaja de que la casa se adapta posteriormente.
En cualquier caso, los puntos clave de un diseño a medida son la adaptación del diseño de la casa a la persona y al lugar.
Veamos qué significa:
La casa debe estar adaptada al lugar
La adaptación de la casa al lugar, es una de las recomendaciones para construir una casa ecológica más importante ya que, sacar provecho de la situación y el clima, es un punto clave en la arquitectura ecológica.
La buena disposición de las aperturas en fachada y la buena utilización de los elementos arquitectónicos consiguiendo captar el sol en invierno y protegernos a través de porches o pérgolas en verano, son algunos de los factores de diseño clave que permiten reducir el consumo energético de una vivienda.
No hay que olvidar tampoco la orientación, pues la posibilidad de asoleo es de gran importancia para iluminar y calentar los espacios interiores.
Adaptación al cliente y a la familia
De la misma forma que una vivienda se adapta al sitio donde se encuentra, también debe adaptarse a la familia que va a habitar en ella.
No es lo mismo una familia de 2 personas que pasan gran parte del día en casa, que una familia de 5 personas en la que sus miembros pasan la mayor parte del tiempo en el trabajo o la escuela.
En Slow Studio, de hecho, pasamos muchas horas al principio de cada proyecto, tratando de entender las necesidades concretas de cada persona y cada familia. Así conseguimos un hogar exclusivo y único para cada cliente.
Priorizar las estrategias de reducción de consumo energético
Como vemos, entre las recomendaciones para construir una casa ecológica, la adaptación al lugar y al cliente, son esenciales en la fase de proyecto.
Pero ¿qué pasa una vez construimos la casa? Una casa ecológica debe ser eficiente y sana y para ello es preciso que se hayan incorporado en fase de proyecto un seguido de estrategias de reducción de consumo energético pasivo. Veamos algunas de ellas.
Captación de radiación solar
La radiación solar es una fuente de calor inagotable de la que podemos aprovecharnos sin consecuencias económicas ni ecológicas.
Aprovechar los rayos del sol para calentar una vivienda es algo básico pero a veces se pasa por alto.
Pues bien, una casa ecológica no puede menos que insistir en este aspecto. La casa se debe orientar a sur, donde en nuestra latitud, tenemos mayor incidencia solar. A sur, colocaremos las mayores aperturas, entre un 50% y un 70% de la superficie deberá ser acristalada siempre que tengamos un buen asoleo.
Además de captar radiación solar a través de las ventanas también es importante retener este calor en los espacios interiores. Un método para conseguir esto es colocar materiales con mucha inercia, es decir, con mucha masa, que reciban la radiación del sol. Estos elementos se calentaran mientras les llegue el sol y tras algunas horas empezaran a ceder el calor a la vivienda.
Utilizar un grosor de aislamiento adecuado
Otro método para mantener un espacio térmicamente agradable es utilizar un grosor de aislamiento adecuado. Poco grosor de aislamiento supone una transmisión del calor demasiado alta, esto provocará que en invierno el calor que ganamos se pierda, y en verano que el calor externo que queremos evitar, entre en la casa.
Usar materiales ecológicos
Otra de las recomendaciones para construir una casa ecológica es el uso de materiales ecológicos y naturales.
La madera y el ladrillo son materiales ecológicos y naturales que no solo parten de procesos de extracción y transformación con baja huella ecológica sino que una vez en casa son un excelente regulador de la humedad ambiente interior.
De hecho, la madera es un material que absorbe más CO2 del que emite en todo su proceso de crecimiento, tala, procesamiento en fábrica e instalación en obra.
Por supuesto, nuestra casa tendrá más materiales tanto en la estructura como en el interior y por ello, quizá una de las principales recomendaciones a tener en cuenta es trabajar con el menor número de materiales posible. Las uniones, juntas y cambios de material son focos de problemas, trabajar con pocos materiales es una garantía de buena ejecución.
Así, ¿qué debo tener en cuenta al escoger un material de construcción?
– Utilizar materiales sostenibles.
Los materiales de construcción deberían ser sostenibles en todo su ciclo de vida, es decir, que tengan un reducido impacto ambiental en todo su proceso de extracción, transformación y colocación en obra.
El acero, por ejemplo, debe calentarse para su transformación en elemento de construcción a una temperatura de entre 800 y 1000ºC por lo que requiere un gran consumo de energía en su producción.
– Utilizar materiales naturales y transpirables.
Las casas ecológicas suelen caracterizarse por tener un mayor grosor de aislamiento que las convencionales. Aun así, no conviene tampoco excederse en cantidad de aislamiento, pues esto puede provocar condensaciones, en este caso deberemos utilizar aislamientos transpirables.
Los materiales deben ser también naturales, transpirables y no deben contener tóxicos que puedan ser emanados al ambiente interior e inhalados por las personas.
Materiales naturales de por sí implica un material poco transformado que llega a casa tal como lo ha producido la naturaleza. Algunos ejemplos de materiales naturales serían la piedra o la madera sin tratar, utilizar materiales naturales es una garantía de ausencia de tóxicos.
Materiales transpirables son aquellos que tienen una cierta porosidad natural que permiten absorber y ceder humedad ambiental, mejorando el clima interior de la vivienda.
No olvidemos que la humedad relativa recomendad es de alrededor del 50%, un porcentaje que permite a nuestro cuerpo regularse de forma adecuada. Por debajo, el ambiente es demasiado seco, generando polvo en suspensión con los temidos ácaros y demás microbios que merman nuestras defensas. Por encima del 50 o 60% el ambiente es demasiado húmedo y se propicia la aparición de condensaciones y moho.
Por último materiales libres de tóxicos son aquéllos que no contienen ingredientes peligrosos en su composición.
Por ejemplo, la lana de roca contiene un conglomerante para mantener las fibras unidas a base de formaldehído que es un componente tóxico y cancerígeno demostrado. Aunque las emanaciones de formaldehído son pequeñas, éstas están presentes en nuestra casa durante muchos años y se van acumulando en nuestras vías respiratorias.
Por último se deben priorizar el uso de materiales de proximidad, materiales de la zona cercana donde se vaya a construir. Con esto se consigue reducir tanto el coste de transporte como la contaminación medioambiental, además de promover la economía local, tan importante tras la crisis económica global.
Mantenerse al día de los sistemas constructivos e instalaciones de nuestra casa
Es importante que el equipo de arquitectos haga reuniones en cada fase de diseño para mantenernos al día de cada una de las decisiones y permitirnos participar en el proceso.
Nuestro estilo de vida tiene mucho que ver con el diseño de nuestra casa, no es lo mismo una familia en la que uno de los miembros trabaja desde casa y por lo tanto puede estar pendiente del mantenimiento diario de persianas, toldos y demás sistemas de la arquitectura pasiva para mejorar el funcionamiento climático natural de la vivienda que una casa en la que todos los miembros pasan el día fuera en cuyo caso las estrategias de climatización serán automatizadas.
De la misma forma la distribución y orientación de los espacios así como la forma de calefactar y refrigerar la casa tendrán mucho que ver con el uso que vamos a hacer de ella.
También es recomendable acudir a la obra junto a nuestro arquitecto para supervisar todo el proceso y entender cómo está construida y cómo funcionan las instalaciones de climatización.
Realizar un concurso de constructores
Quizá una de las más importantes entre las recomendaciones para construir una casa ecológica es realizar un concurso de constructores supervisado por nuestro arquitecto.
Antes de empezar con la construcción, hay que decidir qué constructora va a ser la encargada de llevar a cabo la obra. Esta es una decisión muy importante ya que la empresa puede proponer modificaciones en los materiales o en el sistema constructivo que hemos decidido.
Por este motivo, en Slow Studio enviamos el desglose de las partidas de obra a tres constructoras locales seleccionados por nosotros y por el cliente para que nos envíen un presupuesto para la obra.
A la hora de escoger no iremos directamente a la opción más económica, sino que también nos fijamos en el compromiso, la seriedad y la capacidad del equipo de cada constructora.
Mantener una casa ecológica
La última de las recomendaciones para construir una casa ecológica será siempre el mantenimiento de la vivienda.
Un mantenimiento enfocado, no tanto a los propios materiales, sino al bienestar y a las condiciones de los espacios.
Una casa ecológica está pensada para que requiera el mínimo consumo de energía, aparte de ser respetuosa con el medio ambiente. Por eso hay que procurar llevar a cabo las estrategias básicas para climatizar una vivienda ecológica.
Por ejemplo, hay que aportar la ventilación necesaria para renovar el aire interior y para evitar las condensaciones y humedades. En verano las ventanas suelen estar abiertas, pero en invierno también habrá que asegurar una mínima ventilación en determinadas horas del día.